Como habíamos mencionado en el capítulo anterior, una emergencia es una “circunstancia o conjunto de ellas, desarrolladas durante el vuelo o en tierra, que determinan una situación inesperada que conlleva un riesgo potencial para la seguridad”, ahora bien, dependiendo de cómo se haya presentado la situación del evento indeseado, podemos discriminar entre emergencia prevista o imprevista. En realidad, lo que aquí está en juego es el factor tiempo y toma de decisiones, porque en muchas oportunidades, una emergencia prevista puede convertirse en una imprevista y viceversa dependiendo de las acciones de la tripulación, cumplimiento de procedimientos y lógicamente que aquí también, por más que no sea un aspecto a considerar de manera profesional, el factor suerte tendrá incidencia sobre la finalización del evento.
Por ejemplo: una aeronave con una falla de motor en donde se indique por procedimiento un descenso por debajo de 20.000 pies, no pudiendo descender por debajo de esa altitud por encontrarse en una zona montañosa con picos superiores a 20.000 pies, es un problema.
Una aeronave, que por tráfico deba realizar una esperar prolongada y que producto de esa prolongación del vuelo el comandante se vea obligado a solicitar prioridad para el aterrizaje por disponer de bajas reservas de combustible y que en la final de aterrizaje ocurra un incidente en pista que obligue a la tripulación a realizar un escape (Go Around), realizar el procedimiento publicado y tomar la decisión de tener que dirigirse a la alternativa (pista cerrada por tiempo indefinido) en donde las condiciones meteorológicas no son las óptimas y se combine una situación de emergencia por bajo combustible, podríamos decir que la consecución de los eventos, “suerte”, no fue la mejor.
Es decir, ninguna emergencia es igual a la otra y en todos los casos la consecución de los eventos es diferente. Ahora bien, la preparación, entrenamiento y experiencia son la mejor herramienta para mejorar la toma de decisiones y mitigar los efectos de las circunstancias que generan una situación inesperada, emergencia.
Al contrario que en la emergencia imprevista, en este tipo de emergencia suele contar con un punto a favor: el tiempo.
Este tipo de emergencia suele suceder en la fase de crucero de un vuelo.
¿Por qué hablamos de la fase de crucero? Porque, dependiendo de la situación, una altitud considerable le permitirá a la tripulación tomar decisiones y realizar los procedimientos establecidos en las listas (denominados generalmente QRH, por sus siglas en ingles QUICK REACTION HANDBOOK) con mayor tiempo o precaución que en el caso de las fases de despegue y aterrizaje en donde no solo se suma la baja altitud con el terreno, sino que la aeronave se encuentra configurada de una manera determinada para poder realizar esos procedimientos generando que sea más complejo para los pilotos maniobrar la aeronave en esas circunstancias.
Antes de realizar el vuelo, los pilotos realizan una reunión previa al vuelo (Briefing) con toda la tripulación para repasar los aspectos más significativos del vuelo tales como:
En la reunión previa al vuelo, los pilotos notificarán a los TCP cuáles serán los avisos que les darán en el caso de una situación particular. Estos pueden ser con una señal visual y/o auditiva de acuerdo a lo que se haya estipulado en el Briefing.
Ante el anuncio de una situación de emergencia, el Jefe de Cabina se dirigirá de inmediato a la cabina de mando (Flight Deck) en lo posible con papel y bolígrafo para anotar las instrucciones que el comandante le impartirá: (N.I.T.I) O (N.I.T.S)
Como se puede apreciar, dependiendo del desenlace de la situación, se ordenará dirigir las acciones de manera particular, ya sea ordenando la evacuación de la cabina como retornar a la operación normal. Tanto para cualquiera de los dos escenarios planteados en oposición, todo dependerá de la evolución de los eventos y decisiones que tomen los pilotos para resolver la situación imprevista.
Tipos de ABP (ABLE BODY PASSENGER)
Es un pasajero que deberá ser seleccionado de acuerdo a sus conocimientos, preparación e instrucción por tener que poder ayudar a los TCP en el caso de una emergencia en la que se lo requiera.
Los ABP serán elegidos preferentemente entre: Tripulantes de la compañía, tripulantes de otras empresas, personal de otros sectores de la compañía (Mantenimiento), miembros de fuerzas armadas o de seguridad, pasajeros emocional y físicamente aptos según criterio de la tripulación y se los ubicará frente a las puertas y ventanillas de emergencia. Al instruir al ABP el TCP se presentará ante el mismo y le preguntará si se encuentra apto y si está de acuerdo en colaborar con la tripulación en la evacuación, en el caso de ser necesario.
Al instruir al ABP se deberá hacer preguntas simples y concretas a fin de corroborar que el pasajero instruido ha comprendido las instrucciones.
-¿Cuál es la condición que le indicará a Ud. que debe iniciar la evacuación? -¿En qué momento Ud. deberá abrir la puerta?
-¿Cómo abre la puerta?
-¿De qué manera me va a ayudar?
Preguntas del TCP al ABP:
-¿En qué momento Ud. debe salir?
-¿Hacia dónde deben dirigirse los pasajeros?
Pregunta del TCP al ABP:
-¿Cuándo deberá evacuar a este pasajero?
Puntos a tener en cuenta para la organización de las personas en cabina
Para amerizaje se agregarán las siguientes consideraciones:
Anuncio de Preparación de Cabina
Cuando una Emergencia en vuelo nos haga prever la posibilidad de un aterrizaje accidentado, o de un amerizaje, debemos utilizar todo el tiempo disponible para preparar a los pasajeros y a la aeronave, de forma tal que las consecuencias del impacto queden minimizadas.
Toda la tripulación deberá llevar colocado el uniforme completo para su mayor identificación, con excepción de los objetos punzantes (insignias, lapiceras, etc.).
El anuncio será efectuado por el Jefe de Cabina o quien el designe. Este anuncio deberá hacerse también en idioma inglés.
Luego del anuncio, todos los tripulantes verificarán en sus respectivos sectores el estricto cumplimiento de las indicaciones impartidas, asegurar la cabina y Galleys, de acuerdo a la lista de chequeo.
Un ejemplo de una lista de chequeo de “preparación de cabina” es la siguiente:
Estos son los casos más críticos, ya que el tiempo para tomar decisiones es mínimo. Por ejemplo: fuego en uno de los motores cercano a la velocidad de rotación en donde los pilotos en cuestión de segundos deban decidir entre abortar o continuar con el despegue.
En este tipo de escenarios, no hay tiempo para sacar una lista de chequeo. Se debe accionar de acuerdo al entrenamiento y criterio profesional formado con el conocimiento y experiencia.
La situación es compleja para toda la tripulación, ya que los pilotos estarán concentrados en resolver la situación imprevista y los TCP tendrán que aguardar instrucciones, lidiar con el comportamiento de los pasajeros y en muchas ocasiones obrar de acuerdo a su juicio y criterio ya que se pueden presentar escenarios en los que la comunicación con los pilotos se vea interrumpida por la situación de emergencia. Por este motivo, todo lo que podamos mencionar a partir de este momento, serán consideraciones que en lo posible deberán tener en cuenta para la resolución de la situación.
En circunstancias claramente catastróficas como consecuencia de un impacto violento debido a una emergencia imprevista durante las fases críticas del vuelo, con la tripulación de vuelo incapacitada y las comunicaciones cortadas, la tripulación de cabina actuará de acuerdo con su iniciativa y buen juicio que permita salvaguardar la vida de los pasajeros.
En el caso de tener que evacuar la aeronave, el éxito dependerá de la rapidez, eficacia y adiestramiento de la tripulación.
Como el tiempo es un factor crucial en la resolución de la emergencia, decimos que generalmente lo imprevisto, puede ocurrir en algunas de las FASES CRÍTICAS del vuelo (despegue, ascenso inicial, aproximación y/o aterrizaje) en donde es difícil tomar acciones previas y justamente en estos casos lo más importante es atender a las reglas de seguridad generales.
Como ya hemos visto, es responsabilidad del comandante ordenar la evacuación, si este estuviera imposibilitado de hacerlo, lo hará el tripulante que siga en la cadena de mando (Primer Oficial, Jefe de Cabina).
Tener en cuenta el código PIN:
Este tipo de emergencias sorprende a todos, especialmente a los pasajeros quienes en su mayoría no atinarán a ejecutar ninguna acción acorde a la situación, por lo que deberán impartirse rápidamente las instrucciones concisas y correctas, tomando el control de la situación.
Situación ejemplo de emergencia imprevista durante el RODAJE – DESPEGUE – ATERRIZAJE:
TCPs a pasajeros: “AGACHENSE Y TOMENSE DE LOS TOBILLOS”